Fue cosechador en Mendoza antes de hacerse escritor.
Alberto Laiseca escribió la novela más extensa de la literatura argentina. Se llama “Los Sorias” tiene 1.330 páginas y se trata de un intento por «reflexionar el poder absoluto y la posibilidad de organizarlo de un modo más humanizado» El excéntrico y erudito Laiseca, fue reconocido por sus contemporáneos, como el último de los escritores malditos. Grandote y corpulento. Caminaba lento, con la cabeza gacha, mirando de a ratos hacia el piso y luego con la mirada detenida al frente, algo encorvado.
Tenía el pelo y las cejas largas y despeinadas. Fumaba mucho y tosía mucho más. Hablaba lento. Sus palabras surgían de una boca oculta tras bigotes frondosos, muy parecidos a un lampazo desteñido y rubio saliendo por su nariz. En los ojos, se dibuja el resto, reflejaban la vida y obra de un maestro: chispazos intermitentes de delirio, horror y misterio. O quizás también los recuerdos de una dura infancia en Rosario, o como él la llamaba los restos de una niñez marcada por la “dictadura soviética” de su padre.
“En la infancia los libros fueron la única salida para mí. Los libros y la imaginación. Sin ellos no habría podido aguantar la chifladura de mi viejo. Mi padre era trastornado y muy cruel, profundamente injusto y contradictorio era muy difícil de soportar. Entonces frente a esa situación uno puede terminar de un día para el otro volviéndose loco. Para salvarme de la locura y la muerte la única alternativa que me quedó fue la imaginación: fabricar mundos distintos a los cuales poder colgarme”, recordaba Laiseca en una visita a Mendoza.
Laiseca pasó su adolescencia en Camilo Aldao, un pueblito de Córdoba. Terminado el colegio secundario, marchó a Santa Fe, a estudiar Ingeniería Química en la universidad pero abandonó la carrera convencido que lo suyo era ser escritor. “Me introduje a la literatura más bien por desesperación. A mí me habían trazado todos los caminos que debía recorrer. Me parecía muy injusto. Yo iba a ser ingeniero químico, según mi padre. Y sabía que eso no era para mí, en absoluto”, contó en aquella oportunidad.
“Bueno pero entonces me dije ¿qué hacer? A mí me atraía la literatura, pero escribía muy mal, así que no era un oficio como para animarse. Igual me lancé. Sucedió lo siguiente: cuando realizas un gran acto de valor como soltarte a nadar sin saber nadar, aprendes a nadar, en vez de ahogarte nadas, por eso hay que animarse. Y bueno largué la ingeniería y me vine a Mendoza a trabajar en la cosecha durante varias temporadas. Empecé a liberarme y a escribir muy poquito, muy de a poco”, rememoró sus comienzos.
Así fue como Laiseca después de horas de trabajo físico en el campo para subsistir, empezó a trazar sus primeras historias. Los esbozos de lo que muchos años después se transformaría en el conjunto de una obra robusta de títulos y publicaciones. De Mendoza se trasladó hacia otras provincias hasta mediados de los 60 que se radicó en Buenos Aires. Fue peón de limpieza, empleado telefónico y corrector del diario La Razón. Se desempeñó como periodista escribiendo notas y comentarios bibliográficos para diarios y revistas.
Publicó su primera novela, “Su turno para morir” en 1976; sin embargo, ya trabajaba en su mítico hijo literario “Los Sorias”, novela que concluyó en 1982, pero que recién fue publicada en 1998. En 1991 ganó la Beca Guggenheim y en 2003 fue galardonado con un Diploma de Honor de la Fundación Konex por su labor novelística. Dictó talleres literarios durante 30 años y participó en I-Sat de un ciclo llamado “Cuentos de terror” que popularizó su imagen. En el programa re-interpretaba a los autores célebres del género.
“A mí la realidad me interesa muchísimo, pero me gusta verla bajo la luz del delirio, aumentando desproporcionadamente algunas partes o algún aspecto de ella o achicando otras y hasta en algunas cosas hacerlas desaparecer. Todo esto para que se noten mejor las presencias y ausencias. Esto es el delirio, amplifica o reduce, sirve para expresar mejor la realidad. De este modo logro provocar exageraciones, porque lo que no es exagerado no vive”, explicaba Laiseca en 2008 de nuevo en Mendoza pero ya consagrado como escritor.
Biografía
Alberto Laiseca (Rosario 1941- Buenos Aires 2016). Trabajó en diferentes oficios en distintas provincias antes de convertirse en escritor. Protagonizó el programa de TV Cuentos de terror en I- Sat y condujo el ciclo Cine de terror en la señal Retro. Es el autor de la monumental novela Los Sorias y ha publicado más de veinte libros de cuentos, novelas, ensayos y poemas. Dictó talleres de escritura durante más de treinta años.
Recomendaciones
Si te interesa este autor, te recomendamos leer “Los Sorias”. Pedilo en la biblioteca de tu departamento. También podés ver la serie “Cuentos de terror” producida por I- Sat y disponible en Youtube.